La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) tomó la decisión de suspender la comercialización de un insumo de uso crucial en el control de la salud. La medida se produce después de detectar importantes irregularidades en una serie de tensiómetros, uno de los productos más utilizados en las farmacias para medir la presión arterial, que no cumplían con los requisitos básicos para su venta.

¿Qué producto fue retirado del mercado?

El Boletín Oficial informó que durante una inspección, los agentes de la ANMAT encontraron irregularidades en doce tensiómetros marca ALPK2, modelo SPHINGOMANOMETER, fabricados en Japón. La razón principal para su retiro fue que estos dispositivos no contaban con un manual de uso ni con información esencial sobre el fabricante, el importador o su registro ante la autoridad sanitaria, lo que representa un incumplimiento grave de las normativas vigentes.

En consecuencia, la ANMAT prohibió la venta y distribución de los siguientes modelos de tensiómetros aneroides de la marca ALPK2:

ALP-K2 n° 10-38599

ALP-K2 n° 10-38594

ALP-K2 n° 10-38521

ALP-K2 n° 10-38526

ALP-K2 n° 10-38512

ALP-K2 n° 10-38484

ALP-K2 n° 10-38602

ALP-K2 n° 10-38538

ALP-K2 n° 10-25092

ALP-K2 n° 10-38505

ALP-K2 n° 10-38606

ALP-K2 n° 10-38477

¿Por qué la ANMAT tomó esta decisión?

Según el comunicado oficial de la ANMAT, los inspectores tomaron fotografías de los productos durante la inspección y, al detectar la falta de documentación y registro, los tensiómetros fueron inmediatamente prohibidos para su uso, comercialización y distribución en todo el territorio nacional. La medida se mantendrá vigente hasta que se verifique la legitimidad de los dispositivos y su correcta autorización para circular en el mercado.

El retiro de estos productos es una medida preventiva para proteger la salud de los usuarios, ya que los tensiómetros sin los controles adecuados pueden generar resultados incorrectos, lo que podría derivar en diagnósticos imprecisos o tratamientos inadecuados.